miércoles, 7 de abril de 2010

Lo Que Siembras Cosechas.

Con una voz fuerte y segura un hombre vocifera la venta de sus cepillos, su semblante alegre irradia mucha paz,como cuando alguien había encontrado un tesoro y deseaba que todos lo supieran.

Se acerca a unos jóvenes y como todo un experto en ventas, les dice, compren unos de estos cepillos y sus dientes se pondrán mas blancos que la nieve, lo cual ellos contestaron; no hay dinero hermano.En ese mismo instante, cambio su venta por decirles, Dios les ama y tiene un propósito tan especial con ustedes, que con ojos humanos jamas podrían verlo, crean en su amor y su misericordia no importa como se estén sintiendo, confíen. Hoy quizás no pueden apoyar este trabajo que dios me ha permitido tener, pero otro día me ayudaran, bendiciones mis hermanos.

Sus palabras conmovieron tanto a los jóvenes, que optaron por comprarles,mas le dijeron, tienes una manera de hablar que seria imposible no ayudarte, cuanto verbo; ese verbo solo lo da el espíritu de Dios y se marcho.
Al pasar unos años, uno de los jóvenes vio al mismo hombre con su rostro muy triste, se le acerco; bendiciones mi hermano como esta la fe, lo cual sorprendido, solo pudo decir; tratando de aumentarla. Sabes, el día que te conocí, estabas vendiendo cepillos, irradiabas confianza, no la que el mundo te brinda sino la que solo se logra obtener con la gracia divina. El propósito de Dios para contigo hoy, es tan especial, que con ojos humanos jamas podrías verlo,cree en su amor y su misericordia, no importa como te sientas, confía;recuerdas.

Gracias mi hermano, hoy mas que nunca veo que lo que se siembra en Dios, se recoge en el momento que mas lo necesitamos,este era mi momento.





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